jueves, 8 de diciembre de 2016

LA TUMBA DE COLON

Colón fallece en Valladolid el 20 de Mayo de 1506. Su muerte le pilla allí, ya que seguía a la Corte itinerante de Fernando el Católico. Su funeral se celebró en la Iglesia de la Antigua de Valladolíd y sus restos fueron depositados en el convento de San Francisco.

Su hijo Diego mandó a trasladar los restos  al Monasterio de Santa María de las Cuevas, de Sevilla, también conocido como El Monasterio de la Cartuja. Juan Antonio Colón, primo y mayordomo de Cristobal, se encarga del traslado, entregado a la comunidad de cartuja de Sevilla el 11 de Abril de 1509.

Está documentado que los restos de Cristobal Colón viajaron a Santo Domingo, República Dominicana. Un primer testimonio lo encontramos a Fray Bartolomé de las Cassas, en su obra Historia de las Indias en el año 1561. También constata el traslado a Santo Domingo Diego Ortiz de Zúñiga en su obra Anales. 

Una primera hipotesis de la fecha de su traslado se barajó allá por el 1536, dada por el historiador del S. XIX Antonio López Prieto en la que narra como fue llevado en Carabela a Santo Domingo. Con esta fecha coincide un documento del monasterio en la que testifica que se hae entrega de los restos para su traslado. En este caso la palabra entrega no es sinonimo de salida, ya que se tiene prueba de que esta no se produjera hasta años después.




Aunque no esta documentada con exactitud la fecha exacta que ocurriera, dos son las pruebas que hace pensar que fuera a posteriori del año 1536. Primera que la Catedral de Santo Domingo se terminara su construcción en 1540 y la segunda la Cedulas Reales de Carlos V fechadas en 1537, 1539 y 1540 donde se autorizaba a enterrar en la Catedral los restos de Cristobal Colón y su hijo Diego. El reclamo para tal acción la reliza Doña María de Toledo, viuda de Diego de Colón, como virreina, prima de Fernando el Católico, sobrina de del duque de Alba, hija del comendador mayor de León y benefactora de la Catedral.

Se da como fecha probable de su llegada a Santo Domingo, el 9 de Septiembre de 1544, puesto que es la fecha cuando llega una flota desde Sanlúcar de Barrameda, donde viajaba la virreina, Doña María de Toledo con los restos de su esposo Diego de Colón que falleciera en la Puebla de Montalbán (Toledo), un 23 de Febrero de 1526

Como podemos comprobar no está constatado la fecha exacta de su traslado, pero sí que viajara a Santo Domingo y permaneciera allí hasta su nuevo traslado a la Habana en 1795.

Después de varios años de guerra con Francia, la llamada guerra de Convención, de Rosellón o de los Pirineos, donde Carlos IV salió mal parado, con la ocupación por las tropas Francesas de territorios del norte de Cataluña y País Vasco, el 22 de Julio de 1795 se firma el tratado de Basilea para la Paz. Con este tratado se liberaba los territorios ocupados en suelo de la península a cambio de la cesión a Francia de los territorios de la Isla de la Española.

Estos hechos ocurren siendo Fray Fernando Portillo y Torres arzobispo de Santo Domingo. Se prepara la isla para la entrega a los franceses y Fray Fernando Portillo considera como una de las tareas mas importantes, el traslado de los restos de Cristobal Colón a la Habana.

Los restos mortales fueron trasladado, llegando a la Habana el 5 de Enero de 1796, donde se le hace entrega a D. Felipe de Trespalacios, obispo de la Habana, quedando depositado en la Caledral.



Tras la independencia de Cuba en 1898, los restos mortales de Cristobal Colón sufriría un nuevo traslado. Con ello se abrió un nuevo debate de donde debería ser llevados, proponiéndose como posibles destinos la Rábida en Huelva, junto al sepulcro de los Reyes Católicos en Granada, en la Mezquita de Córdoba o en el Panteón de los Marinos Ilustres en San Fernando, Cádiz. Fue el descendiente de Colón, el duque de Veragua, quién al final decide que los restos de Colón debería reposar en la Catedral de Sevilla, en el sepulcro que Arturo Mélida realizó para albergar los restos y que en un principio permaneció en la Habana, trasladándose a Sevilla junto a los restos.

 El sepulcro está formado en su base por un plinto de mármol sobre los que se apoyan cuatros heraldos, en representación de los cuatros reinos existentes, el reino de Castilla, León, Aragón y Navarra que sujetan el féretro destinado a guardar los restos de Colón.

En el 2002 la Universidad de Granada y tutelado por el genetista D. José Antonio Lorente Acosta, contastó que los restos que se encuentran en la Catedral de Sevilla son de Cristobal Colón. El estudio lo realiza obteniendo ADN de los restos y comparándolos con el de su hermano e hijo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

EL LEGADO DE MARTÍNEZ MONTAÑÉS EN SEVILLA: SANTO DOMINGO DE GUZMAN PENITENTE

Para situar el origen de la figura de Santo Domingo Penitente, nos tendremos que ir al 1605 cuando Diego González de Mendoza, encargaba a Ju...